La disminución de la temperatura en un 60% provoca enfermedades articulares, llevando a la atrofia. Cómo recuperar la salud de las articulaciones en solo 45 días.

A pesar de la niebla mágica, el invierno se convierte para muchos en un período de exacerbación de sensaciones dolorosas en las articulaciones. El Instituto de Reumatología, al realizar un análisis exhaustivo de los datos, descubrió que precisamente en el período de noviembre a abril, las articulaciones y los cartílagos enfrentan pruebas especialmente difíciles. Más del 15% de la población experimenta exacerbaciones de artritis, osteoporosis y fracturas óseas. Y a menudo, las exacerbaciones no terminan con la llegada de la primavera, sino que continúan afectando al organismo debilitado incluso en la temporada cálida.

En este artículo, analizaremos qué factores convierten el período frío en una verdadera prueba para las articulaciones y qué se puede hacer para mantener su salud en esta época del año. También presentaremos un método innovador desarrollado teniendo en cuenta las características de las condiciones invernales, que puede ayudar a mantener la movilidad de las articulaciones en este período.

Factores que afectan negativamente a la salud de las articulaciones:

Bajas temperaturas y reducción del flujo sanguíneo.

La disminución de la temperatura del aire, característica del invierno, provoca la constricción de los vasos sanguíneos, lo que limita el flujo de oxígeno y nutrientes a las articulaciones. Sin una nutrición adecuada, los tejidos articulares se degradan, y comienzan procesos inflamatorios irreversibles. Esto afecta especialmente a las rodillas. En los casos más graves, la constricción de los vasos sanguíneos puede llevar al desarrollo o exacerbación de la artrosis. El dolor deja de ser situacional y persigue a la persona incluso en estado de reposo.

Cambios en la presión atmosférica.

Las fluctuaciones en la presión atmosférica, típicas del período invernal, tienen un impacto negativo en las articulaciones. Estos cambios, especialmente para las personas con enfermedades reumáticas, se convierten en una fuente de intensificación del dolor y malestar. Los procesos patológicos se agravan y progresan, surgen dolores fuertes y constantes, y aumenta la sensibilidad al frío. Si no se toman medidas para la recuperación de las articulaciones, el dolor puede volverse insoportable, lo que requiere hospitalización.

Deficiencia de luz solar y vitamina D.

Las horas reducidas de actividad solar en los meses de invierno conducen a la deficiencia de vitamina D. Esta vitamina juega un papel clave en el mantenimiento de la salud de las articulaciones y la prevención de procesos inflamatorios. Si hay deficiencia de vitamina D en el organismo, también se ve afectada la absorción de calcio, un macronutriente necesario para los huesos. La falta de calcio conduce a la osteoporosis, haciendo que los huesos sean frágiles y propensos a fracturas. Es por eso que el porcentaje de fracturas y luxaciones aumenta drásticamente en la temporada de frío.

Estilo de vida menos activo

El día de luz acortado y las bajas temperaturas a menudo significan que muchos de nosotros nos volvemos menos activos. La falta de actividad física conlleva la debilitación de los músculos alrededor de las articulaciones y la disminución de la movilidad. La falta de apoyo muscular conduce a la deformación de las articulaciones, lo que en un 35% implica inflamaciones y en un 27% resulta en lesiones.

Exceso de peso

En el período invernal, cuando la actividad disminuye y el apetito aumenta, muchos se enfrentan al problema del exceso de peso. El exceso de peso ejerce una presión adicional sobre las articulaciones, aumentando su desgaste y pudiendo causar dolor e incomodidad. Si una persona ha sufrido de obesidad durante mucho tiempo y no ha ganado peso adicional en invierno, los riesgos de desarrollar enfermedades articulares, como la osteoartritis, aumentan hasta el 90%.

La combinación de estos factores crea condiciones ideales para que las articulaciones y el cartílago se deformen, y la cantidad de recursos vitales como el líquido sinovial y los nutrientes disminuya. Como resultado, aparecen dolores sordos y los movimientos se vuelven limitados. Los huesos, privados de nutrientes, se vuelven frágiles. El riesgo de fracturas aumenta hasta un 78%. A continuación se presentará un gráfico que muestra cómo aumenta el número de pacientes con quejas de problemas articulares a medida que llega el invierno.

Es evidente que tales impactos negativos requieren medidas específicas para superarlos y prevenirlos. Sin embargo, a pesar de las dificultades, es posible hacer frente a estos problemas. La aplicación de medidas adecuadas es la clave para mantener la salud de las articulaciones en el período invernal. A continuación, analizaremos qué pasos concretos se pueden tomar para minimizar el impacto de los factores invernales en el estado de sus articulaciones.

¿Qué hacer para mantener la salud de las articulaciones?

Hay dos opciones:

Puede comenzar a comer adecuadamente y agregar a su dieta vitamina D, B6, consumir más alimentos ricos en omega-3, glucosamina y condroitina. En este caso, también será necesario agregar ejercicio regular a su rutina y comenzar a controlar su peso, ya sea de manera independiente o con la ayuda de un dietista. Es posible que se necesite masaje y fitoterapia, pero definitivamente deberá evitar períodos prolongados de carga en las articulaciones.

Sin embargo, todos somos realistas y entendemos que cambiar de repente nuestro estilo de vida, construido durante décadas, es muy difícil. Especialmente si el trabajo favorece un estilo de vida sedentario o una dieta pobre. En este caso, los científicos ofrecen otra opción: usar el bálsamo vegetal Maxiflex.

Esto es lo que muestra la estadística recopilada por el Instituto entre aquellos que utilizaron Maxiflex como el principal método de mantenimiento de las articulaciones durante el invierno.

¿Cómo funciona Maxiflex?

Maxiflex contiene los componentes naturales más potentes disponibles en la actualidad, y funcionan en 4 etapas:

Etapa 1 - Reducción de la inflamación + Mejora de la circulación sanguínea

JEl aceite de hígado de tiburón y el aceite de ricino penetran profundamente en los tejidos y estimulan la circulación sanguínea. Con una circulación sanguínea normal, la articulación recibe una nutrición completa, lo que puede ayudar a mantener su movilidad natural y su funcionalidad. En esta etapa, se elimina la hinchazón y se controlan los procesos inflamatorios e infecciosos en los tejidos.

Etapa 2 - Normalización de la producción de colágeno

El extracto de raíz de ginseng puede ayudar a producir la llamada "proteína de juventud y flexibilidad", que recupera las fibras conectivas en las articulaciones y la producción natural de colágeno. El colágeno es la proteína que proporciona elasticidad a los ligamentos y la movilidad de las articulaciones entre los huesos. El cartílago es responsable de la amortiguación y la protección de los huesos contra el desgaste.

Etapa 3 - Mejora de la calidad del líquido sinovial

El mentol y la alcanfor mejoran la calidad y cantidad del líquido sinovial en las articulaciones. A su vez, este líquido lubrica las superficies óseas y el cartílago ubicado entre ellas. Esto reduce la fricción, garantizando movimientos suaves y sin dolor.

Etapa 4 - Recuperación integral del sistema musculoesquelético + Fortalecimiento del sistema inmunológico

El aceite de canela y jengibre son extremadamente importantes para el funcionamiento adecuado del sistema musculoesquelético. Regeneran las áreas dañadas de los tejidos cartilaginosos. En esta etapa, el trabajo de la articulación se normaliza por completo, y esto elimina la inflamación y la rigidez.

La fórmula recuperadora de Maxiflex se utiliza en todo el mundo y está respaldada por miles de reseñas entusiastas de consumidores que han experimentado sus beneficios.

El producto es excelente también porque es versátil. El bálsamo es beneficioso en cualquier etapa del desarrollo de enfermedades articulares: tanto para aquellos que ya sienten los primeros signos de daño en las articulaciones, como para aquellos que sufren de la enfermedad en la edad madura y avanzada. Parece imposible, pero el complejo evita todos los factores de riesgo y actúa de manera dirigida en las áreas problemáticas que requieren apoyo.

¿Dónde se puede obtener Maxiflex?

Maxiflex es un producto natural. Se creó para que cualquiera pueda cuidar sus propias articulaciones. Para usar el bálsamo, no se necesitan conocimientos o habilidades especiales. Usted puede pedir el producto directamente al fabricante y usarlo en casa.

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